Cierre de año, recuento de los Daños.
A veces pareciera que el tiempo pudiera pasar y nosotros ignorar la importancia de dirigirnos a algún lugar para simplemente estar… pero la realidad es otra porque el tiempo es un recurso limitadísimo como para solo dejarlo pasar, y aprovecharlo un derecho importantísimo que tenemos todos solo por estar, pero y ¿“ahora”?.
Para determinar el “ahora” que te toca aceptar al último mes del año…siempre es importante evaluar desde diferentes:
Ángulos (perspectivas) y,
Con diferentes lupas (medidas de valor cualitativas y cuantitativas)
El saldo (resultados) que te ha quedado,
Financiera, emocional, social y empresarialmente (Indicadores de Desempeño Variables),
Para su equipo (operación),
Después de transcurrido el tiempo (12 meses).
Si eres empresario o directivo dentro de una empresa o proyecto debes de seguir esta fórmula (recuento de los Daños) para crear un enfoque objetivo que te permita evaluar realmente la diferencia entre las expectativas con las que te comprometiste al comienzo del año y por las que trabajaste personal y colectivamente para cumplir vs la realidad actual en la que te encuentras para que puedas definir qué sí y qué no corregir, cambiar o mantener.
Un ejemplo del uso de ésta fórmula de manera general sería el siguiente:
Lupa Cuantitativa
“Sólo el 50% de los proyectos en los que participé alcanzaron lo que se plantearon en sus proyecciones comerciales y tan sólo el 25% superó las expectativas, pero me siento motivado porque se logró lanzar al mercado al 100% de los proyectos y el 75% ha sido bien recibido y tiene ventas.”
Lupa Cualitativa
“Personalmente me siento decepcionado por lo difícil que ha sido retener y enfocar al equipo y los socios para que alcancen sus objetivos, pero al mismo tiempo agradecido con quiénes han podido encontrar su lugar, aportar valor y alinearse a los objetivos de negocio que nos planteamos.”
Conclusión Objetiva
Pienso que a pesar de que financieramente y organizacionalmente no fue un gran año, tampoco fue uno malo para nosotros porque las proyecciones del próximo año serán mucho más claras y contarán con la información del mercado en todo momento. Lamentablemente uno de los proyectos no ha sido muy bien aceptado y no se si seguir impulsando o dejarlo morir.
Al evaluar tus resultados de ésta manera, logras ser objetivo para tener una visión lo más cercana de la realidad que te permita tomar decisiones sobre cómo hacer tus proyecciones hacia adelante,
No hacerlo puede nublar tu visión con las opiniones de tu intuición y sentimientos, volviéndo menos exacta y clara tu capacidad para tomar decisiones que lleven a tu negocio de manera más segura al éxito que buscas.
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